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¡La historia secreta del fichaje de Pizarro!

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Algo de azar y un agujero en una valla posibilitaron que el SV Werder Bremen se hiciera en 1999 con los servicios de un joven y prometedor peruano que finalmente se convirtió por méritos propios en historia viva de la competición. Entrevista exclusiva de Bundesliga en Español para conocer los pormenores de su fichaje.

Lo primero: ¿quién es Jürgen L. Born?

Jürgen Ludger Born, berlinés nacido en 1940 y profesional de la banca con amplia experiencia en Latinoamérica, asumió la presidencia del SV Werder Bremen en verano de 1999. Los logros verdiblancos durante su mandato de nueve años no son magros: logró un título de Bundesliga y dos Copas Alemanas para las vitrinas de la entidad hanseática. Y fichó a Pizarro, claro está.

- © gettyimages / Friedemann Vogel

Buenos días, Herr Born. Un placer. Como descubridor de Claudio Pizarro, ¿podría contarnos cómo conoció al futuro Bombardero de los Andes? 

Jürgen L. Born: Mi contrato con el Werder comenzaba oficialmente el 1 de julio de 1999 y la temporada se iniciaba más tarde, de modo que aún tenía tiempo para realizar un último proyecto para mi anterior empleador; me encontraba en Perú para auditar un banco

Cuando estaba en la habitación del hotel en Lima me acordé de un partido internacional que vi meses atrás. Claudio me llamó la atención de forma notable. (…) Así que fui a verle entrenar. El Alianza Lima entrenaba a puerta cerrada, pero por suerte encontré un hueco en la valla por el que pude entrar. Seguí la sesión escondido detrás de una columna. De todos modos no necesité mucho tiempo para percatarme de su agilidad de movimientos, su rapidez y cabeza fría ante la portería, saltaban directamente a la vista. Estaba seguro: estaba hecho para el Werder.

“No es solo un fantástico jugador, sino también una gran persona que beneficia en muchos sentidos al equipo en el que juega”. Jürgen L. Born sobre Claudio Pizarro

¿Y cómo se consumó el fichaje en sí?

Cuando volví a Bremen informé directamente a Klaus Allofs [director deportivo del Werder]. Después volamos juntos a Lima y volvimos a colarnos en un entrenamiento a través del mismo agujero en la valla. Klaus también quedó impresionado al momento de las cualidades de Claudio. 

El único problema que había era que Pizarro había firmado un precontrato con el Real Betis Balompié (España). Invitamos a nuestro hotel a Claudio, a su padre y a Carlos Delgado, que posteriormente se convirtió en su asesor. Nosotros queríamos ficharlo sí o sí, aunque en realidad su fichaje pendía de un hilo; temíamos que el Betis se interpusiera. No estuvimos seguros de la operación hasta que Claudio vino a Bremen para firmar. 

Usted conoce muy bien a Claudio Pizarro. ¿Cómo le describiría?

Claudio fue uno de los pilares del equipo, elevó enormemente nuestra calidad deportiva. Además, otros jugadores explotaron futbolísticamente –para bien– a su lado.   

No es solo un fantástico jugador, sino también una gran persona que beneficia en muchos sentidos al equipo en el que juega. Es una persona muy simpática, que siempre piensa de forma optimista. Si no hubiera sido futbolista, igualmente hubiera tenido todas las puertas abiertas, es muy inteligente. Si se hubiera convertido en vendedor de coches, podría haber vendido un auto sin tener siquiera la licencia de conducir. Por cierto: es impresionante lo rápido que aprendió alemán cuando llegó”.

Werder Bremen, la casa que Claudio Pizarro ayudó a construir.