Todos ellos dejaron una huella imborrable en la Bundesliga. Diez leyendas por propios méritos que ahora ondean la bandera de la Bundesliga con orgullo en todos los rincones del planeta. Estrellas como Yasuhiko Okudera, un pionero del fútbol que con su llegada en 1977 al 1. FC Köln se convirtió en el primer japonés en disputar la Bundesliga. En su primera temporada, Okudera se estableció como titular a pesar de las dudas que generaba su llegada y se coronó campeón de la Bundesliga y de la Copa Alemana. Descubra a uno de los iconos de la 'Official Bundesliga Legends Network'.

• Nombre: Yasuhiko Okudera
• Fecha de nacimiento: 12 de marzo de 1952 en Kazuno (Japón)
• Partidos en la Bundesliga: 234 (26 goles)
• Clubes en la Bundesliga: Colonia, Hertha Berlin, Werder Bremen
• Internacional: 42 veces
• Palmarés: Bundesliga (1977/78), segundo clasificado en la Bundesliga (1982/83, 1984/85, 1985/86), Copa Alemana (1977/78), finalista de la Copa Alemana (1979/80)

Siempre hay un pionero en cada nación, un primer jugador que tomó una decisión sin precedentes y abandonó su país para probar fortuna en la Bundesliga. Japón ostenta una rica tradición de futbolistas en la máxima categoría del fútbol alemán, con los casos notables de Shinji Kagawa, Atsuto Uchida y Yoshinori Muto en los últimos tiempos. Sin embargo, en realidad todo empezó con Yasuhiko Okudera, quien dejó una brillante huella en el Furukawa Electric Soccer Club, hizo las maletas y se plantó en Colonia en 1977.

• ¡Estas son las Leyendas oficiales de la Bundesliga! (agregar link al art. matriz)

Okudera, que ya sabía lo que era ganar títulos en tierras niponas, vivió una veloz y exitosa adaptación al fútbol europeo y contribuyó netamente al doblete alcanzado por el Colonia en su primera temporada en la Bundesliga; en el banquillo, el legendario DT Hennes Weisweiler.

Yasuhiko Okudera vistió durante cinco años la camiseta del Werder Bremen - Getty Images

Tras tres temporadas a orillas del Rin, Okudera cambió nuevamente de aires y fichó por el Hertha Berlin. No obstante, apenas una campaña después firmó por el Werder Bremen de otro ídolo perenne en la competencia, Otto Rehhagel.

A punto estuvo de colgarse aún más medallas pero su quedó a las puertas: su Bremen acabó segundo en tres temporadas, en dos de ellas únicamente la diferencia de goles se interpuso entre Los Verdiblancos y la Meisterschale: en la 1982/83 a favor del vecino Hamburgo, en la 1985/86 para beneficio del Bayern de Múnich.

Tras esa campaña, y cinco años después de vestir por primera vez la camiseta del Werder Bremen, Okudera regresó a su país con el innegable estatus de superestrella (además de 42 internacionalidades con la selección de Japón), de leyenda; y no fue para menos: Okudera se convirtió en el primer jugador del País del Sol Naciente en brillar -y de qué forma- en la máxima categoría del fútbol alemán.

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