Borussia Dortmund y FC Schalke 04 empatan a cuatro goles en el Clásico del Ruhr más trepidante de los últimos años

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Borussia Dortmund y FC Schalke 04 rindieron homenaje al fútbol con un Clásico del Ruhr que ya es historia de la Bundesliga. "Los Negriamarillos" tan solo pudieron sumar un punto tras dejar escapar una renta de cuatro goles en la segunda mitad. ¡Vuelve a revivir todo lo que significó aquel choque!

Guía de la Bundesliga: Borussia Dortmund

Cuando dentro de unos años, el aficionado de Borussia Dortmund o FC Schalke 04 se pregunte por el Clásico del Ruhr más emocionante, trepidante, sorpresivo e ilógico, seguro que guardará un lugar especial en su memoria para el disputado en la Fecha 13 de la temporada 2017/18. Una parte para cada equipo. Cuatro goles por bando. Un inicio frenético y un final memorable. Ya nadie podrá olvidarlo.

El Signal Iduna Park se vistió para la ocasión con sus mejores galas. Con el estadio a reventar y con la necesidad de lograr los tres puntos para no distanciarse más aún del FC Bayern München, el Borussia Dormtund de Peter Bosz saltó al campo. Por su parte, el equipo de Domenico Tedesco, en su primer Clásico del Ruhr como técnico a sus 32 años, se presentó dispuesto a hacer bueno el recién recuperado lugar de privilegio en la histórica rivalidad.

25 minutos. Ese fue el tiempo que transcurrió entre el pitido inicial y el 4-0 obra de Raphael Guerreiro. El BVB lograba algo así en un Clásico del Ruhr desde 1964, cuando hizo el 4-0 en el minuto 23 y terminó imponiéndose por 6-2. En Bundesliga, no anotaban cuatro goles en la primera mitad desde 2013, en un encuentro ante Greuther Fürth. El comienzo soñado por Los Negriamarillos. La peor pesadilla para Los Mineros.

- © imago

Aubameyang vuelve a anotar

El delantero gabonés fue el encargado de abrir el marcador. Auba, con 11° tanto de la temporada y el sexto en el Clásico del Ruhr en nueve partidos, volvió a ver portería tras 307 minutos sin marcar. El tanto fue además el número 96 del delantero del BVB en la Bundesliga, igualando de esta forma con Anthony Yeboah como máximo goleador africano de la historia del campeonato alemán.

También fue una tarde de reencuentro con el gol para Mario Götze. Desde el 16 de diciembre, en un duelo ante TSG 1899 Hoffenheim, no marcaba Götze en partido oficial vestido de negriamarillo. Entre medias, Benjamin Stambouli hizo el autogol número 999 en la historia de la Bundesliga. Tan solo se llevaban 20 minutos.

Con un Schalke completamente sometido a los contragolpes locales, Raphael Guerreiro, tras un gran centro de Aubameyang, puso el cuarto ante el júbilo -comprensible- de los aficionados negriamarillos.

- © gettyimages

Tedesco provoca la reacción

No hay remontada épica en el fútbol sin que un técnico mueva ficha. El joven DT del Schalke se vio obligado a hacerlo y le salió de cine. Leon Goretzka, en su partido 100 en la Bundesliga (todos con el Schalke) y Amine Harit por Franco Di Santo y Weston McKennie apenas ocho minutos después del tanto de Guerreiro. Matija Nastasic por Thilo Kehrer justo antes del descanso. Las tres sustituciones hechas con 45 minutos por delante. Sin nada que perder. Riesgo para buscar la recompensa.

Y el partido dio un vuelco, inesperado pero bello. Guido Burgstaller, con su primer disparo a puerta del partido, puso el 4-1 en falta de media hora para el final. Amine Harit, solo cuatro minutos después, el 4-2. Peter Bosz, que no lo veía claro, también buscó un cambio, aunque con tintes defensivos. Marc Bartra entró por Andrej Yarmolenko y el BVB apostaba por defender la renta. La expulsión por doble amarilla de Aubameyang en el minuto 72 no hizo otra cosa que confirmarlo.

- © DFL DEUTSCHE FUSSBALL LIGA / Lukas Schulze

Naldo culmina la remontada

Con la entrada de Dan-Axel Zagadou por Raphael Guerreiro en el minuto 83, el Dortmund situó sobre el campo a cuatro centrales: además del francés, Omer Toprak, Sokratis y Marc Bartra. El Schalke, sin perder la fe en ningún momento, tiró de épica y Daniel Caligiuri, de perfecto remate por pierna izquierda, ajustó el 4-3 a falta de cuatro minutos más un alargue que llegó hasta casi los diez minutos.

El héroe de todo remontada inolvidable fue en esta ocasión el brasileño Naldo, quien acudió al remate de un saque de esquina cuando el electrónico indicaba el minuto 94. El cabezazo del espigado central sonó con fuerza en toda la grada de color azul del Signal Iduna y tornó en silencio el mayoritario color amarillo. El Clásico del Ruhr más legendario ya es historia, pero historia para no olvidar.